Primavera, verano, otoño e invierno; el ciclo de la vida. Después de haber hablado aquí, en este blog, del verano, del otoño y del invierno, ya solo nos queda cerrar nuestro ciclo, paradójicamente, con su comienzo, con la estación del renacimiento; la primavera. Y, ya puestos, vamos también a entender qué es la astenia primaveral y cómo puede la Homeopatía ayudarnos a superarla.

“En el corazón de todos los inviernos vive una primavera palpitante y detrás de cada noche, viene una aurora sonriente”.

Khalil Gibran

El significado de la primavera.

La primavera comienza con el equinoccio primaveral, cuando la duración del día igual a a la de la noche. A partir de este momento, la luz y el principio yang gobernarán de una forma cada vez más intensa y profunda todos los aspectos de nuestra vida. Y esto será así hasta la llegada del otoño, momento en el que la oscuridad, esencia del principio yin, comenzará a gobernar de nuevo a toda la naturaleza. El sueño y el despertar infinito y eterno de la Vida.

Los seres humanos hemos creado nuestros propios ciclos vitales, al margen de la naturaleza. Así, en estos ciclos de fantasía, el año comienza el 1 de enero y, ya clásicamente, se ha convertido en el momento en el que decidimos plantearnos nuestros nuevos propósitos para el año entrante. Qué curioso; precisamente en medio del invierno, el momento menos oportuno para comenzar ningún nuevo proyecto.

En realidad, es la primavera el momento para analizar nuestra vida, hacer los nuevos planes y reafirmar o reconducir todo lo que ya tenemos en marcha. Es el momento en el que la vida florece de nuevo y es importante aprovechar este impulso natural para aplicarlo en nuestra propia existencia.

La primavera también es el momento ideal del año para hacer una limpieza y una renovación del organismo. El invierno fue el momento de guardarnos en casa y comer más fuerte, para adaptarnos mejor al frío, y de descansar de toda la actividad del verano y del otoño. Ahora en la primavera toca desentumecernos y aligerarnos para afrontar la actividad y la vida que promete esta nueva estación.

Según la Medicina Tradicional China, el elemento que rige la primavera es la madera y está relacionada con la columna y las articulaciones. Y también con nuestros músculos, ligamentos y tendones, así que este momento del año es ideal para trabajar nuestra flexibilidad y nuestra  condición muscular y física en general. Este puede ser uno de los grandes propósitos para el nuevo ciclo que comienza.

Mentalmente, el elemento madera y la primavera están relacionados con la claridad mental y la capacidad de centrarnos y concentrarnos, con la capacidad de planificar y de tomar decisiones. Un desequilibrio en este elemento se puede manifestar como una falta de juicio y en una pobre capacidad de planificación y organización. Pero también, si este elemento se encuentra en exceso, puede manifestarse como una mente muy rígida en personas que quieren organizarlo todo y a todos.

Según también esta tradición médica oriental, la emoción relacionada con la primavera y con elemento madera es la cólera y su sonido el grito. La cólera reprimida puede dañar el hígado y la vesícula biliar, que son los grandes órganos relacionados con esta estación. La cólera es una emoción muy potente y poderosa que, si no sabemos canalizar, puede arrasarlo todo a su paso, por dentro de nosotros y también por fuera.

Los ojos son los órganos sensoriales relacionados con la primavera, la vista su sentido y las lágrimas su secreción. Así, la tristeza y la melancolía también serán emociones relacionadas con el elemento madera y podrán afectar a nuestra función hepática si llegasen a inundar nuestra vida.

La templanza y la alegría serán las emociones que equilibren el elemento madera y que contribuyan así al perfecto funcionamiento de nuestro hígado y de nuestra vesícula biliar.

El elemento madera también se dice que aporta la inspiración y el deseo de vida y cuando es débil puede faltarnos el entusiasmo y el impulso de vivir. Asimismo, un hígado débil o sobrecargado suele manifestarse con una sensación de poca energía al despertar por la mañana. Recordad que en la primavera la vida se reactiva.

“La primavera ha venido, nadie sabe cómo ha sido”.

Antonio Machado

El hígado y la primavera.

En este post titulado Cómo cuidar el hígado con Homeopatía: 10 medicamentos homeopáticos para el hígado ya os contaba muchas cosas sobre este órgano y sobre cómo cuidarlo.

El hígado es el gran laboratorio de nuestro organismo y, junto con los riñones, la principal planta depuradora con la que cuenta nuestro cuerpo para drenarse y desintoxicarse.

El hígado ayuda al metabolismo de los hidratos de carbono, de las grasas y de las proteínas, regula el nivel de azúcar en sangre, según las necesidades, gracias a su capacidad de almacenar glucógeno. También fabrica muchas de las enzimas que ayudan en un gran número de reacciones químicas, tanto a nivel del propio hígado como en otros puntos del organismo. El hígado también produce distintas proteínas imprescindibles para el correcto funcionamiento de nuestro sistema inmunológico, participa en los mecanismos de coagulación sanguínea y fabrica vitaminas como la A y almacena otras como la D y el complejo B, además de minerales como el cobre, el cinc y el hierro.

Como gran planta depuradora, filtra las toxinas de la sangre y las descompone para posibilitar así su eliminación. Además, actúa en la regulación del metabolismo y la homeostasia general desactivando algunas hormonas como las tiroideas y las sexuales.

La primavera es el momento ideal para darle un empujón a nuestro hígado después de la sobrecarga del invierno. Un drenaje y detoxificación con Homeopatía con medicamentos como Chelidonium, Carduus marianus, Berberis, Sulfur, Nux vomica o Lycopodium, entre otros, puede ser una opción muy eficaz y sencilla en este sentido. El médico experto en Homeopatía sabrá elegir los medicamentos homeopáticos que mejor se adapten a las necesidades de cada persona.

La primavera le brinda un espíritu de juventud a todo”. 

William Shakespeare

La alimentación durante la primavera. Nutrirnos y limpiarnos.

La primavera puede ser el momento perfecto para replantearnos nuestros hábitos de alimentación. La vida renace, todo reverdece y es el momento de decidir con qué materiales queremos reconstruir nuestra casa, nuestro cuerpo. Recordad que se estima que cada 7 años todas las células de nuestro cuerpo se han renovado, así que siempre tenemos la oportunidad de comenzar de nuevo a edificar nuestro organismo con los mejores materiales posibles.

Así, la dieta de la primavera debe buscar una nutrición que al mismo tiempo posibilite los procesos de drenaje y detoxificación.  Verduras frescas, cereales integrales, frutas y legumbres nos aportarán todos los nutrientes que nuestro organismo necesite. Si a estos alimentos básicos añadimos regularmente frutos secos (almendras, nueces, avellanas, anacardos…), semillas (girasol, calabaza, sésamo, lino…), germinados, algunos huevos y algún lácteo (sobre todo ácidos, tipo yogur o kéfir) nuestro cuerpo gozará de toda su energía y podrá, a la vez, ir aligerándose de la sobrecarga del invierno.

Si lo que queremos es comenzar este nuevo ciclo de vida y renovación que supone la primavera con una “limpieza en profundidad” también podemos pasar unos días comiendo exclusivamente frutas y verduras o bebiendo zumos de frutas, caldos de verduras e infusiones. Pasar unos días solo bebiendo agua puede ser también una experiencia muy profunda y renovadora. Sobra decir que todas estas opciones deben hacerse con sentido común y entender que no todas las personas pueden ser aptas para ellas. Ante cualquier duda, un médico experto en nutrición siempre podrá asesorarnos.

Yo estoy profundamente convencido de que es tan importante lo que comemos que cómo lo comemos. Estamos acostumbrados a vivir en “piloto automático”, sin poner consciencia en casi nada de lo que hacemos y no nos damos cuenta que comer y nutrirnos, además de un regalo que la Madre Naturaleza nos hace, es un auténtico milagro. Cuando comemos, esa fruta que entra en nuestro cuerpo se hace una con nosotros para no solo formar parte ya de nuestro ser, sino también para formar parte de todo lo que somos y hacemos a través de su energía, la que tan generosamente comparte con nosotros. La energía de esa manzana ya forma parte de mis pensamientos, mis sentimientos y mis actos.

Y sobre lo de comer animales, a mí me gusta pensar que pasar por esta vida infringiendo el menor daño posible a todos los seres que la compartimos es el propósito más sensato y más humano que podemos tener. Respetar la dignidad y la vida de nuestros hermanos menores siento que nos ennoblece y que nos coloca a los seres humanos en el lugar que nos corresponde en este planeta. La Vida no está hecha, no nos acompaña en nuestra Madre Tierra, para que la explotemos sino para que la honremos y la cuidemos.

Entiendo que esto es algo muy personal y que no todo el mundo tiene que sentirlo de la misma manera, pero es que yo aspiro a vivir en una humanidad en donde toda vida se respete, tan solo por el hecho de que todos formamos parte de la misma Vida. Eso hablará de una humanidad que ha comprendido el vínculo que nos une a todos, que ha conectado con la compasión y que estará mucho más cerca de la Paz. Y llamadme loco pero, como decía John Lennon: Imagina.

Solo compartir con vosotros un par de pensamientos de personas mucho más sabias que yo, seres que a lo largo de la historia han sabido inspirarnos lo mejor de nosotros mismos:

Mientras el círculo de su compasión no abarque a todos los seres vivos, el ser humano no hallará la paz por sí mismo.

Albert Schweitzer

La grandeza de una nación y su progreso moral pueden ser juzgados según la forma en la que tratan a sus animales.

M.Gandhi

Mientras los hombres sigan masacrando a sus hermanos los animales, reinará en la tierra la guerra y el sufrimiento y se matarán unos a otros, pues aquel que siembra dolor y la muerte no podrá cosechar ni la alegría, ni la paz, ni el amor.     

Pitágoras

La Homeopatía también nos cuida en primavera.

No todas las personas respondemos de la misma manera a los diferentes estímulos y situaciones de la vida y esto es algo que se verifica a cualquier nivel. Una situación que una persona vive como un pequeño problema para otra puede suponer todo un drama. Muchos pacientes reumáticos van a sufrir severas agravaciones de sus dolores y de su rigidez con el frío y la humedad, en cambio para otros apenas significará nada.

La primavera supone un cambio de ciclo muy profundo; salimos del letargo del invierno para renacer a la ferviente actividad del verano que llega. Muchas personas vivirán esta transición sin problemas, incluso con entusiasmo, al sentir que van dejando atrás la oscuridad y el frío del invierno para abrirse al calor y a la luz del verano que se aproxima. Otras en cambio sienten dificultades de adaptación que se manifiestan de diversas maneras.

Alteraciones del sueño, agravaciones de sus problemas de piel, digestivos, respiratorios, aumento de los dolores de cabeza y otra infinidad de procesos, más o menos severos, pueden acompañar a algunas personas durante la transición a la primavera. De entre todas esas situaciones que pueden tener una presencia especial en este momento podríamos destacar dos: las alergias a los pólenes y la astenia primaveral.

Alergia primaveral.

Sobre esta dolencia, también conocida como polinosis, fiebre del heno, alergia al polen o rinoconjuntivitis alérgica (por ser el lagrimeo, la secreción nasal y los estornudos los síntomas más frecuentes), así como sobre las alergias en general, hemos escrito ya varios post en este mismo blog.

Si tenéis especial interés en el tema, permitidme que os remita al último que yo mismo escribí; Homeopatía y alergia primaveral: 10 medicamentos homeopáticos útiles en la alergia al polen.

La astenia primaveral.

¿Qué es la astenia primaveral?

La astenia primaveral se manifiesta como una sensación de debilidad y falta de vitalidad, tanto a nivel físico como mental y emocional, sin que haya otra causa orgánica que lo justifique. Estas molestias, en la mayoría de los casos, son leves o moderadas y suelen desaparecer al cabo de unos días.

Se estima que entre un 10 al 20% de los pacientes que acuden a la consulta del médico de familia durante las primeras semanas de la primavera lo hacen por cuadros relacionados con la astenia primaveral. Igualmente se calcula que un 2% de la población sufrirá sus efectos en algún momento de su vida Y, en general, es más probable que afecte a mujeres de entre 20 y 50 años.

Tiende a considerarse más un problema adaptativo que una enfermedad en sí misma, lo cual no excluye que la cantidad e intensidad de los síntomas que algunas de estas personas pueden sufrir les pueda llegar a provocar graves perturbaciones en su calidad de vida.

Síntomas de la astenia primaveral.

Entre los síntomas más frecuentes podemos destacar:

  • Sensación de falta de energía y de motivación.
  • Somnolencia diurna.
  • Irritabilidad y cambios de humor.
  • Ansiedad y nerviosismo.
  • Tristeza, desánimo, melancolía.
  • Pérdida de apetito o aumento de la sensación de hambre. Problemas digestivos.
  • Dolores de cabeza.
  • Dolores musculares y articulares.
  • Dificultades cognitivas como debilidad de memoria o falta de concentración.
  • Disminución del deseo sexual.

¿Qué provoca la astenia primaveral?

Los cambios climatológicos (su incidencia suele aumentar en las primaveras en las que el calor irrumpe antes o con mayor fuerza), el cambio de horario que se produce a finales de marzo, como es el caso de España, o la alteración de los estilos de vida con la venida de los días más largos y cálidos, son algunas de las causas con las que se tiende a relacionar toda la sintomatología que acompaña la astenia primaveral.

Lo que sí es cierto es que, en los últimos tiempos, parece que la incidencia en la población de esta mala adaptación al comienzo de la primavera están aumentando significativamente. Esto puede tener que ver con que, como ya comentábamos al comienzo de este post, cada vez vivimos más al margen de los ritmos naturales y en una sociedad que, además, es cada vez más dura y hostil.

El estrés y la ansiedad como estados ya casi naturales, el individualismo como filosofía de vida, la sobrecarga laboral con cada vez menor reconocimiento, las relaciones personales cada vez más difíciles y complejas y estructuras familiares también cada vez más precarias, son características de una sociedad que debilita la  resiliencia y reducen la capacidad adaptativa del organismo ante cualquier tipo de cambio.

Es razonable pensar que si durante el invierno, que es la época destinada a descansar tras la intensa actividad del verano y del principio del otoño, vivimos desarrollando trabajos y obligaciones “como si no hubiera un mañana”, cuando llegue la primavera, con su fuerza y con su empuje, algunas personas les pille un poco a contramano, con la energía baja y con escasa capacidad para adaptarse al ritmo y a la frecuencia tan altos de esta estación.

Cómo saber si tienes astenia primaveral y cuándo consultar al médico.

La astenia primaveral se considera un estado de dificultad de adaptación a los cambios propios de la  estación por lo que, lo razonable y más frecuente, es que dure un periodo corto de tiempo. Si la sintomatología dura más de dos o tres semanas o es tan intensa que altera profundamente la vida de la persona, este será el momento de consultar con el médico.

En este sentido, lo primero que el médico hará será descartar cualquier problema orgánico, como una anemia, alergias u otro tipo de dolencias, que puedan estar causando los síntomas de la persona.

¿Qué podemos hacer para mejorar la astenia primaveral?

Lo primero que tenemos que hacer para cambiar algo es observarnos para comprender dónde estamos teniendo actitudes y comportamientos que nos perjudican, que van contra nuestro equilibrio físico y emocional. Cada cual tiene que ser lo suficientemente humilde, honesto y valiente como para ser sincero y reconocer todo aquello que podría cambiar para mejorar su vida y, ya puestos, la de los demás.

Esos cambios en nuestro estilo de vida, incluso, en nuestra filosofía de la vida, los dejo a la consideración de cada cual. Yo solo quiero proponeros algunos trucos que puedan ayudarnos a aumentar nuestra energía y nuestra capacidad de adaptación.

  • Depurarnos. Limpiar nuestro organismo y, especialmente, nuestro hígado de las sobrecargas del invierno puede ser una de las cosas más renovadoras y energizantes que podamos hacer por nuestro cuerpo al comienzo de la primavera.
  • Cuidar nuestro descanso. Cenar ligero y varias horas antes de acostarnos, procurar actividades relajantes antes de la hora de ir a dormir, ordenar los horarios, cuidar la temperatura y todo lo que tenga que ver con el confort de la habitación; en definitiva, mimar nuestro sueño.
  • Hacer ejercicio regularmente. Sobre todo, intentar divertirnos haciéndolo. Es el momento de comenzar a salir y de disfrutar al aire libre. Y si es en contacto con la naturaleza, qué más puedo decir cuando toda ella está despertando.
  • Encontrar espacios para la relajación. Meditar, hacer respiraciones conscientes, el yoga, la oración, contemplar la naturaleza con consciencia plena…cualquier cosa que nos conecte con nuestro Ser, con el Silencio, que nos aísle del ruido en el que vivimos, aunque sea por un momento, contribuirá en gran medida a centrarnos y a conectarnos con nuestra verdadera fuerza.
  • La alimentación de la primavera. Ha de comenzar a ser más fresca y ligera que la del invierno, cargada de alimentos calóricos y energizantes. Es muy recomendable aumentar la cantidad de frutas y alimentos frescos, aunque aún no tanto como en el verano. Legumbres, cereales integrales, verduras, ensaladas y cremas frescas (para los días más cálidos) y algunas frutas, pueden ser la base nuestra alimentación. Los frutos secos y las semillas siempre la enriquecerán. Los huevos, de animales criados con respeto, también será una fuente de proteínas y de otros nutrientes muy interesante.
  • Conectarnos con los demás. En primavera la vida renace, despierta, se abre de nuevo y es el momento en el que nosotros también podemos experimentar esta apertura hacia los demás. Puede ser el momento de descubrir, si no lo hemos hecho ya, que lo que más felices nos hace a las personas es rodearnos de relaciones de amor.

La Homeopatía y la astenia primaveral.

Los síntomas que pueden padecer las personas que sufren de astenia primaveral, como ya hemos visto, son muchos y variados, de manera que no todas las personas lo manifestarán de la misma manera. El enfoque personalizado que la Homeopatía tiene a la hora de tratar cualquier problema hace que sea ideal a la hora de poder ajustar el tratamiento más adecuado a la manera particular que cada persona tenga de sufrir este estado de desadaptación.

Los medicamentos homeopáticos, precisamente, lo que hacen es mejorar nuestros mecanismos naturales de reequilibrio y de adaptación. Y lo harán estimulando nuestras defensas, cuando lo que se trate sea de superar una infección, o mejorando nuestro estado energético y fortaleciendo y equilibrando nuestro sistema nervioso y nuestros ejes hormonales en el caso que ahora nos ocupa.

Además, los medicamentos homeopáticos son tan seguros que podremos usarlos en mujeres embarazadas, niños y adolescentes, personas mayores, personas con enfermedades de otro tipo, incluso con insuficiencias renales y hepáticas, y en pacientes polimedicados.

Como ya comentaba, el tratamiento y los medicamentos que usaremos en cada persona estarán adaptados a cada paciente. Cualquier médico experto en Homeopatía podrá valorar a la persona para indicarle así el o los medicamentos más adecuados a su caso, teniendo en cuenta los aspectos físicos, mentales, emocionales y del entorno vital propios de esa persona.

Solo como ejemplos, algunos medicamentos homeopáticos que podremos considerar en relación con los síntomas más frecuentes podrían ser:

  • Somnolencia diurna. Nux moxchata
  • Insomnio y alteraciones del sueño. Coffea, Ignatia, Kalium phosphoricum
  • Irritabilidad y cambios de humor. Lachesis, Sepia, Ignatia, Kalium phosphoricum
  • Ansiedad y nerviosismo. Gelsemium, Ignatia, Argentum nitricum
  • Tristeza, desánimo, melancolía. Natrum muriaticum, Sepia, Picricum acidum, Phosphoricum acidum.
  • Pérdida de apetito o aumento de la sensación de hambre. Problemas digestivos. Nux vomica, Lycopodium, Carbo vegetabilis, Chelidonium
  • Dolores de cabeza. Natrum muriaticum, Kalium phosphoricum, Phosphorus.
  • Dolores musculares y articulares. Arnica, Rus toxicodendrom, Actea racemosa
  • Dificultades cognitivas como debilidad de memoria o falta de concentración. Kalium carbonicum, Anacardium, Baryta carbonica.
  • Disminución del deseo sexual. Sepia, Lycopodium, Agnus castus.

Como decía, no pretende ser una lista exhaustiva; hay otros medicamentos que también podrían estar indicados según la persona en particular. Es tan solo para ilustrar las posibilidades que la Homeopatía puede darnos a la hora de ayudar a estas personas.

¡Que la primavera nos haga florecer!

En estos tiempos distópicos en los que nos está tocando vivir sería precioso dejar que esta primavera también hiciera renacer dentro de nosotros lo mejor que todos llevamos dentro, pues yo estoy profundamente convencido de que todos nosotros llevamos una Chispa Divina que tan solo está esperando a que abramos una pequeña fisura en nuestra coraza para mostrarse en todo su cálido esplendor.

Cada muestra de cariño, de ternura, cada mirada compasiva, cada gesto amable, cada expresión de Amor, en cualquiera de sus formas, nos reconcilia con nuestra Naturaleza y hace que vivamos en coherencia con lo que realmente somos. Por eso solo es posible ser feliz si se es una buena persona.

Y recordemos que, como decía el gran Pablo Neruda:

Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera.

Todo lo que quieras compartir en la sección de comentarios será recibido con mucha alegría e intentaré resolver cualquier duda que podáis tener.

Deja un comentario





corazon-azul_55

También te puede interesar

Taller de homeopatía

julio 27, 2023

Oportunidad de doctorado con financiación completa en Brasil.

Ha surgido una oportunidad para una beca de doctorado Cotutelle totalmente financiada para explorar el uso de la homeopatía en...

junio 13, 2023

5ª Conferencia HRI: “Investigación de vanguardia en homeopatía” Del 16 al 18 de junio – Londres

Los días 16, 17 y 18 de junio tendrá lugar la 5ª Conferencia Internacional de Investigación del Instituto de Investigación...

junio 12, 2023

Suscríbete a Homeopatía Suma

Recibe en tu email todas las novedades de la web

Al rellenar este formulario, aceptas la política de privacidad de la ANH y nos otorgas tu consentimiento expreso, libre e inequívoco para incorporar tus datos a nuestra base de datos y enviarte noticias, links e imágenes mediante email. En cumplimiento de la ley 34/2002, de 11 de julio de Servicios de Sociedad de la Información y de Correo Electrónico (LSSI), te informamos que tu dirección de correo será incluida en un fichero automatizado, utilizado para el envío de información sobre salud y homeopatía. La ANH garantiza un uso limitado de los datos a los fines descritos, y se compromete a respetar los derechos recogidos en el Reglamento escribiendo un mail a informacion@homeopatiasuma.com.